Su contenido en nutrientes depende de su orígen floral y geográfico. En general encontramos pólenes con:
· Humedad: 4 a 8%
· Grasas: 6% aprox.
· Proteínas: 15 a 35%
· Hidratos de Carbono: 25 a 40 %
Entre sus componentes destacan:
Azúcares: Contiene principalmente fructosa y glucosa, y en menor cantidad sacarosa, trealosa, maltosa, isomaltosa, erlosa, etc.
Ácidos grasos: Ácido palmítico, ácido linoleico, ácido linolénico, ácido oleico, ácido caprílico, ácido láurico, ácido mirístico, ácido esteárico, ácido cáprico, ácido aráquico, etc.
Aminoácidos: Ácido aspártico, ácido glutámico, triptófano, leucina, lisina, isoleucina, valina, prolina, fenilalanina, arginina, serina, glicina, tirosina, metionina, hidroxiprolina, cistina.
Minerales: Selenio, hierro, calcio, silicio, zinc, potasio, sodio, cobre, magnesio, manganeso, fósforo, etc.
Vitaminas: Betacaroteno, B1, B2, B6, C, D, y E.
Otros: Enzimas como la diastasa, amilasa, fosfatasa e invertasa. Pigmentos. Flavonoides, que le confieren su capacidad antioxidante y fitoesteroles, que ayudan a controlar los niveles de colesterol.